Cuando no se ve nada….

Van pasando los días y estamos ya casi a mediados de junio, otro mes que se va y nada, no veo nada en el horizonte. Se dice que “no hay mas ciego que el que no quiere ver”, pues creo que en mi caso es lo contrario, intento ver donde no hay nada que mirar, y más interés, ilusión, alegría que le pongo para ver algo, nada, no veo nada.

A veces pienso que no debería pensar más, pero a estas altura es imposible, he estado mucho tiempo (sobre todo los dos primeros años) haciendo mi día a día sin echarle cuenta a la adopción, solamente cuando dábamos un pasito o un tropezón le prestaba atención, pero después de cuatro años y medio desde que empezamos, es simplemente imposible, porque creo que ya nos toca, bueno, desde que empezó el año siento que ya no me queda nada, que me van a llamar de un momento a otro, y ya veis, han pasado casi seis meses, que parecen nada y mucho a la vez.

Volvemos a esa cuestión tan relativa del tiempo en el proceso de adopción, que pasa y pasa, que a veces parece que no transcurre y otras que ha transcurrido demasiado deprisa.

Desde que empezamos con la adopción, mi vida ha ido a retazos, a veces muy ilusionada, a veces triste, a veces desesperada por tener hijos, a veces pasota y sin echarle cuenta, este ultimo estado lo conseguí durante bastante tiempo hasta que fui cayendo en la desesperación del 2010, por los problemas que estaba teniendo nuestra ecai, hasta tal punto de quererlo paralizar todo, y entonces fue cuando decidí hacer el blog, compartirlo todo y sentirme arropada por familias, que como nosotros estábamos pasando por algo tan difícil y laaaaargo. Desde entonces me siento más tranquila y arropada, se empezó a moverse la cosa y nuestros ánimos dieron un giro de 180º, pero aun así, aquí seguimos, sin ver el final.

Intento que estos sentimientos no afecten a mi vida, no creais que estoy todo el día lamentándome, ni mucho menos, salgo, entro, hago, deshago, quedamos con los amigos, disfrutamos de todo lo que tenemos, me gusta disfrutar de todo, pero cuando paro un poquito para sentir a mis peques, me doy cuenta que el tiempo ha pasado y donde dije a ver si en mayo, ahora es junio, y será julio….. no sé, no veo el momento de recibir la llamada, de ver a mis hijos, de nada.

El tiempo pasa y aunque me lleno de cada cosita que hay en mi vida sigo sin tener a mis niños, tan anhelados y queridos, sigo con ese pequeño hueco vacio, sigo viendo en los peques de mis amigos, que van creciendo a la velocidad de la luz, los mios…..